sábado, 7 de mayo de 2011

Leyendas.

La muerte crea mitos y a veces puede ser un poco injusta con los vivos. En los Beatles convivieron dos genios, Paul y John, que escribieron verdaderos himnos del siglo XX, marcando sin remedio la música pop, y que provocaban incluso una absurda dicotomía: ¿de quién eres, de John o de Paul? Como si no se pudiese ser de los dos. 

Chapman descerrajó cinco tiros y acabó con Lennon. Nació la leyenda. McCartney (Liverpool, 1942) ya está cerca de cumplir los 70 y, con una carrera que nunca ha parado, es habitual esa broma de '¿quién es ese señor con cara de señora inglesa?', en alusión a sus operaciones de cirugía estética. 
John, siempre John. Se conocieron en plena adolescencia cuando McCartney entró a formar parte de The Quarrymen, el grupo que Lennon había formado en la escuela. Paul, dos años menor, era hijo de una enfermera (la 'Mother Mary' de 'Let it Be', que murió de cáncer en 1956) y de un obrero, Jim, quien había tocado en un grupo de jazz y deseaba que sus dos hijos fueran músicos. Regaló su trompeta al primogénito y él la cambió por una guitarra.
The Quarrymen desembocaron en The Beatles. Y las canciones se firmaban como Lennon-McCartney. Los primeros años se sentaban el uno junto al otro y componían. Más tarde, los egos o las toneladas de creatividad chocaron y prefirieron trabajar cada uno por su lado. Pero sus nombres siguieron apareciendo juntos. Ellos dos se separaron mucho antes de que se anunciara la ruptura de la banda en 1970 y, aunque les costó atravesar la barrera, parece que hubo algún acercamiento posterior que al menos hizo que no se despidieran como amigos.
 La reacción de Paul a la muerte de John supo fría. Los periodistas se le acercaron el 9 de diciembre de 1980 y sus palabras no mostraban el dolor, al menos a ojos del mundo, sólo la sorpresa, el estupor de quien ha recibido un jarro de agua fría.
Más tarde confesó que no pudo parar de llorar y que tardó mucho tiempo en volver a subirse a un escenario por la pena de haber perdido a su mejor amigo.
En la actualidad, Paul continúa dando conciertos. Y seguro que en alguno de esos momentos sigue acordándose de John.

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