martes, 12 de octubre de 2010

John Lennon.

Los setenta años de JL no se olvidan en lo que se ha denominado el "Año Lennon".


El día 9 fue un día especial. John Lennon, ese niño que fue abandonado por su padre, rodeado de una sociedad que en vez de avanzar hacia delante lo hacía hacia atrás, que perdió a su madre a los diecisiete años, que se crió con su tía y que un buen día conoció a Paul McCartney creando el mágico grupo The Beatles, habría cumplido setenta años. Ese genio que junto con Paul, George y Ringo intentó sacar al país de la sensación de tristeza - consiguiéndolo - y pobreza tras una Guerra, que luchó por la paz, por la igualdad, que reclamó los principales derechos de las personas, que proclamó el amor, que le dio un vuelco a la música, al estilo, al rock y que un día dijo que los Beatles eran más populares que Jesucristo, habría celebrado su setenta cumpleaños. Ese genio que se hizo leyenda, mito, historia. Que nos dejó frases tan pronunciadas como All you Need is Love y canciones tan conocidas como Imagine. Un hombre que nació y murió un día 9 dejando ese mensaje que jamás se desvanecerá. Un hombre, al que la música, le debe mucho.



Felicidades, John.





La única verdad que hay es que Lennon siempre fue un gran luchador y en todos los aspectos. Puede haber gente que diga que fue una causa perdida y que estaba loco, pero el tiempo ha demostrado que era puro corazón y que era un genio. Quiso a su madre, quiso al padre que le abandonó, quiso a Paul McCartney más de lo que nadie pueda imaginar y amó con toda su alma a Yoko Ono por mucho que le moleste a la gente.
De toda su historia me quedo con esa gran amistad que tuvieron Paul y él. Eso no mucha gente puede conseguirlo. Fueron, simplemente, Lennon&McCartney y con eso queda dicho todo. Una asociación. Una mezcla explosiva. La mejor combinación posible.


Se querían, y lo demostraron. Y lo más grande de todo es que esa amistad durará siempre por dos motivos: porque nosotros, al recordar a los Beatles, recordaremos esa bonita relación consciente o inconscientemente, y porque ellos fueron y son almas gemelas que no podían estar la una sin la otra.



- ¿A dónde vamos chicos?
+ Arriba del todo, Johnny
- ¿Y dónde está eso?
+ ¡¡En lo más alto de lo alto!!






Eso fueron los Beatles. Pasaron de ser nada a ser "lo más alto de lo alto".





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Pues bien, hoy he leído en el periódico El Mundo un artículo de Sostres titulado "Fisking" Lennon y me gustaría comentar bastantes cosas:

En primer lugar decirle al señor Sostres que esté tranquilo porque su artículo lo leerá toda persona que compre hoy el periódico, y no porque sea una genialidad lo que ha escrito, sino por el simple hecho de incluir “Lennon” en el título, así que ya tiene un motivo por el que darle las gracias. Parece ser que usted no sabe mucho sobre la vida de John Lennon, pero no pasa nada, el Mundo esta lleno de ignorantes que hablan sin saber. Su artículo me ha resultado penoso. Patético. Ya no hablo de cada “aclaración” que se ha permitido hacerle a la letra de la canción más conocida en el mundo, Imagine. Como bien titula, se trata de IMAGINAR, y no se trata de imaginar lo que ya es, sino lo que puede ser. Eso de que Lennon fue uno de los mayores enemigos de la humanidad es totalmente falso y si no lo cree vaya a consultar los miles de libros que se han escrito sobre él y sobre los Beatles. Ellos fueron los que sacaron de la tristeza al Mundo tras la Guerra, los que alegraron la vida a muchísimas personas, cosa que hoy en día siguen haciendo. Sinceramente creo que no ha comprendido nada de él ni de sus letras. Nació en mitad de una Guerra, su padre le abandonó y su madre fue atropellada por un policía borracho cuando él tenía tan solo diecisiete años. Se rodeó de la peor gente, no tuvo dinero ni para comprarse una guitarra y, sin embargo, llegó a ser todo lo que es ahora. ¿Millonario? Sí, pero lo consiguió a base de esfuerzo, fruto de su trabajo. Sinceramente creo que es una persona a la que admirar y no criticar. Es una imagen de superación: cómo de la nada, de vivir en la miseria, de no tener dónde caerse muerto, se puede conseguir todo, ya sea fama, ya sea riqueza, pero sobre todo conseguir transmitir esas ganas de vivir, ese pensamiento de “imaginar” que todo puede ser mejor sí tú quieres y lo intentas, no ya el Mundo, sino todo lo que hagas en esta vida. Lennon no cantó a la droga, Lennon cantó al amor, a la paz y, justamente, a la humanidad. Fue una persona que sólo quiso un Mundo mejor en el que hubiese amor y paz, nada más. Y sí, sus “himnos buenistas” seguirán acompañándonos para siempre, generación tras generación y hasta que este Mundo toque a su fin porque lo que Lennon nos aportó no fue sólo una bonita letra o un ritmo pegadizo. Nos recordó que hagas lo que hagas, hazlo con amor, que no hay nada que no se pueda hacer si uno lo intenta (All You Need is Love). Si después de setenta años todavía se escucha a John Lennon o a los Beatles es porque todavía seguimos pensando en que aquello de lo que nos hablan es posible. Y esa es la grandeza de Lennon, que después de llevar cuarenta años muerto la gente lo recuerda, se sigue escribiendo de él - aunque sean gilipolleces como ha hecho usted -, en la radio se siguen oyendo sus éxitos, en la televisión podemos ver documentales de su vida, en las redes sociales como Facebook o Tuenti sigue apareciendo y Google o Youtube le homenajeando, como el día 9, poniendo, en vez de su logotipo, un dibujo emblemático de su cara. Creo, señor Sostres, que Lennon aún no ha muerto y sigue muy vivo y eso es gracias a sus canciones y a sus letras y no porque fuese el enemigo número uno de la humanidad o porque se pusiese ciego a LSD o porque no supiera distinguir el bien del mal.


Por último decir VIVA JOHN LENNON Y VIVAN LOS BEATLES.